Hasta siempre e infinitas gracias al poeta de las noches blancas de Suamox: ‘Tushö’ Medina

Foto | Archivo particular
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“Donde nacen noches blancas, donde el fuego es ilusión”, escribió el poeta, el autor y el cantante de mil y un versos llenos de sentida inspiración; estos en particular dedicados a su natal Sogamoso, quien el pasado 16 de diciembre se despidió de su público y de los escenarios musicales, dejando sentimientos de tristeza por la despedida, aunque mucho más de alegría y gratitud en quienes ya por años hemos seguido de cerca su trayectoria artística, y entendemos el valor de su incalculable aporte a la cultura, al arte y a la historia de este hermoso Valle de Suamox.

Por | Álvaro Augusto Vargas Rojas
@alvaroaugustovargasr

Sin lugar a dudas se trata de nuestro gran amigo Juan Carlos Medina Cortés, más conocido por todo su público y amigos como el ‘Tushö’ Medina, a quien su padre, don Joseto Medina, como él mismo lo relata, le dejó en sus venas ese amor por la música y las ganas de cantar desde la esquina del tiempo donde se da la vida, describiéndolo como un lugar mágico de nuestra bella ciudad, en el que don Joseto, se reunía con sus amigos de cuerdas a interpretar mágicas canciones que se quedaron en el corazón de Tushö y que marcaron con tinta indeleble su camino artístico, que con disciplina y constancia lo mantuvo activo hasta la presente fecha.

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Ese es el camino musical en el que muchos de nosotros lo acompañamos hasta ese sábado; día en que con sentimientos de infinita gratitud se despidió de su público con la satisfacción del deber cumplido, recibiendo todas las manifestaciones de agradecimiento por aquello que a lo largo del tiempo nos regaló desinteresadamente para alegrarnos los días, que no es algo diferente a su talento, composición y canto; una mezcla de finos ingredientes que acompañados de su sello personal, auténtico, dieron lugar a su invaluable creación representada en muchas canciones llenas de versos de ensueño que le escribió a las situaciones cotidianas que todos vivimos, con la manera más agradable para hacerlo.

Quienes crecimos en la Sogamoso de los años ochenta y noventa sabemos que ‘Tushö’ era una leyenda, sabíamos que había un cantante que interpretaba poesía, quizá en el parque Santander, quizá en alguna de las materas de la carrera 11 o posiblemente en el parque El Laguito; con suerte un día llegó a nuestras manos algún cassette con cualquiera de sus canciones, bastaba escuchar un verso y el rasgado inconfundible de su guitarra para conectar de inmediato con la expresión de nuestras raíces ancestrales hechas poesía y canción, así como para querer escuchar en vivo estas tonadas originales, privilegio que enhorabuena nos concedió la vida más adelante.        

La memoria hoy me lleva unos años atrás, unos 25 años, oportunidad en la que bajo la dirección del maestro Calixto Raúl Araujo, su mentor musical, como él mismo lo dice, se realizó la grabación de un trabajo discográfico con varios cantautores sogamoseños llamado ‘Locos del Parque’, siendo el más representativo de ellos ‘Tushö’ Medina con su poema llamado ‘Lo que queda amor es tiempo’.

Vale precisar que unos meses antes, este poeta se había posicionado alto en las estaciones de radio con su sencillo titulado ‘Ansar’, que lo dio a conocer a nivel nacional, cuyo estribillo dice “Beber de ti la vida, robar de ti los gestos, y aparecer en tus sueños sin que sepas quién soy; tú amándome a escondidas, yo amándote en silencio, aprendiendo los dos a decir amor… eres tan bella, tan esencial, en mí, única”; letras con la que muchos novios se enamoraron, y otros dedicándola e interpretándola, llegamos a pasar del noviazgo al feliz matrimonio y a la conformación de una bonita familia, como efectivamente le ocurrió a quien ahora escribe estas cortas y sinceras líneas, habiendo tenido la oportunidad de darle personalmente las gracias al artista en su evento de despedida que recientemente tuvo lugar en nuestra querida ‘Ciudad del Sol y del Acero’.

Algunos años después, otro gran amigo como lo es Andrés Galán ‘Nek’, acertadamente logró que ‘Tushito’ volviera a los escenarios musicales, dándonos la oportunidad de apreciar de cerca la invaluable obra de nuestro cantautor, para evidenciar la creatividad, la fuerza, la magia y su original talento a la hora de interpretar musicalmente cada poesía, que verso a verso, y una a una, se quedaron en nuestras almas para siempre.

Hoy, en nombre de mi familia y amigos, dentro de quienes no puedo dejar de nombrar a mi esposa Sandra Liliana, a mis hijas Arianna y Ela, a mis siempre amigos Gonzalo J. Bohórquez ‘Chalo’, desde El Diario de Boyacá; a Manuel Albán Barreto y Andrés Galán ‘Nek’, desde su apoyo y amor incondicional por el arte y la música; y me tomo la vocería, en nombre de todo el público que por muchos años seguimos a ‘Tushito’, le decimos al poeta cantautor, mil y mil gracias hermano por todo lo que nos regalaste a través de tu música, por lo que hiciste y seguirás haciendo por nuestra amada Sogamoso, por lo que representas y representarás siempre para el patrimonio artístico y cultural de todas las generaciones sogamoseñas presentes y futuras que inevitablemente sabrán de la existencia de un artista que con su talento dejó siempre en alto el nombre de esta querida ciudad.

“Voy a arrancar de sus llamas la que se vuelva en mi voz, árbol donde reposar, y encontraré chocando las estrellas, el golpe seco que me mantenga vivo y así no ver como nazco en el olvido o en la ilusión que se perdió en un domingo”, termina así el eterno poema que desde lo más profundo de su ser dedicó el poeta a su natal y amada Sogamoso.

Gracias ‘Tushito’, Dios te bendiga y acompañe junto a tu familia por siempre, ¡un abrazo de todo tu público amigo!

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