El Gobierno Departamental anunció que próximamente se darán a conocer las medidas para hacer frente al segundo pico de la pandemia en Boyacá.
El término del 2020 y el inicio del 2021 significó el momento más crítico para el departamento de Boyacá desde que comenzó la pandemia, la ocupación de camas UCI en el territorio boyacense superó la barrera del 60%, situación que no ocurrió en todo el 2020, y ciudades como Tunja, Duitama y Sogamoso presentaron altos indicadores de ocupación en sus centros médicos.
Por eso hoy el departamento está a la expectativa de las medidas a tomar para mitigar la propagación del virus. El Gobierno Departamental todavía no ha hecho un pronunciamiento oficial, aunque si anunció que próximamente estará dando a conocer las medidas que le ha autorizado el Ministerio del Interior.
La opción más radical sería declarar una cuarentena estricta, que es completamente impopular para el Gobierno Nacional, también lo es entre amplios sectores de la población por sus nefastos efectos sobre la economía, pero que de seguir en aumento la ocupación de camas UCI, se convertiría en la única opción para cortar las cadenas de contagio.
Es que no es una situación sencilla, no se trata solo de la ocupación de camas, sino que se presenta simultáneamente el desabastecimiento de medicamentos para tratar pacientes COVID, y la falta de personal médico.
Aunque todavía es una incógnita la determinación que tome la Administración Departamental, se avizora la repetición de medidas que se han tomado a lo largo de la pandemia, medidas que promuevan toques de queda en los 123 municipios, y que limiten de una u otra manera la movilidad de las personas.
Y si bien la cuarentena estricta es una opción vista con malos ojos por un amplio sector ciudadano, no quedará otra opción en caso de que la ocupación de camas UCI supere el 80% en determinado momento.
