Por | Miguel Ángel Peña Moreno, Asesor TIC / @MiguelPTIC
Cada vez son más frecuentes las transmisiones en vivo, reuniones familiares, presentaciones académicas, eventos y cualquier otra situación que solía realizarse presencialmente antes de la pandemia Covid – 19. Las profesiones se tuvieron que adaptar al conocimiento básico de emitir con una cámara y micrófono sus conocimientos vía internet.
Tratar de encontrar información en este aspecto es algo recurrente, se encuentran desde elaborados cursos web hasta tutorías personalizadas en cuanto al desarrollo de la transmisión en vivo. El software libre OBS es el más utilizado sin dejar de lado a StreamYard que ofrece una plataforma más amigable y básica, muy intuitiva para quienes buscan lo simple pero decoroso. Las entidades gubernamentales recurren cada vez más a este medio para mostrar sus avances en gestión, pero en algunos casos dejan mucho que desear sus emisiones carentes de profesionales que no operan sus equipos con la calidad que se espera de dichas organizaciones.
El principal problema es que no se reconoce ese conocimiento como relevante, de buena fuente he escuchado que algunos líderes en su prepotencia piensan que pueden encomendar la responsabilidad de transmitir en vivo a cualquier persona, endilgándole el peso de la imagen a quienes son competentes en otros aspectos, pero que con el tiempo y en vista de las circunstancias se ven forzados a llevar a cabo estas tareas con resultados medianamente aceptables. Es precisamente allí cuando los productores audiovisuales y muchos profesionales del mundo TIC vieron afectado su trabajo por quienes realizando un trabajo a medias convencieron a los organizadores o dirigentes que no se necesitaba ir más allá de lo mediocremente presentable en cuanto a transmisiones online.
En el contexto académico por estos días escuchaba a docentes pedir capacitación en herramientas o ambientes virtuales de aprendizaje. Es cierto, que en el deber profesional de cada uno está capacitarse y actualizarse sobre los avances que su carrera exige, pero no es lo mismo que todos hablen el mismo idioma a que cada uno le hable distinto a una población, en este caso estudiantil. La claridad en los conceptos y utilización de herramientas TIC sobre todo en el ámbito educativo es necesaria para el avance de la sociedad y sus generaciones que llevarán las riendas en un futuro.
