Hay varios sectores críticos entre Vado Hondo y Aguazul, pero el que está provocando los mayores problemas en la movilidad es el puente sobre la Quebrada Negra, a unos cinco kilómetros de Pajarito. La comunidad reclama la construcción de un puente militar y que el Gobierno le preste atención a ese corredor, como se lo ha dado a la vía entre Bogotá y Villavicencio.
Habitantes de Pajarito, por donde pasa la Carretera del Cusiana, que une a Boyacá con Casanare, le echan la culpa de lo que está sucediendo con ese corredor a los contratistas del Invias, que realizan obras mediocres, lo que genera que los problemas por el mal estado de la banca y de los puentes se vuelvan eternos.
Esa carretera supuestamente estaba totalmente terminada hace más de diez años, fue entregada con una pavimentación de casi el ciento por ciento, con modernos puentes sobre quebradas y ríos pero cada vez que llueve aparecen los tramos por donde no se puede transitar y los cierres parciales y totales para el paso de vehículos.
Es así como la carretera estuvo cerrada los dos últimos meses del 2021 y el primer mes del 2022; con bombos y platillos se anunció la reapertura pero fue cerrada de nuevo en abril del 2022 y reabierta en julio del 2022.
Después de ese ha permanecido abierta solo en épocas de verano. En 2023 los usuarios, entre ellos transportadores y comerciantes de los dos departamentos, han tenido que padecer los cierres diarios y las disposiciones sobre paso restringido. También es habitual que los viajeros tengan que permanecer horas y horas dentro de vehículos de transporte público o carros particulares en interminables trancones.
A quienes menos les interesa que se acaben los problemas de la carretera es a los contratistas del Invias, que usualmente tienen trabajo durante casi todo el año. Cuando no es un puente al que toca hacerle reparaciones es un tramo de la banca que cedió o un sector del pavimento que se levantó. Los contratistas del Invias siempre tiene trabajo y no solamente hacen obras de mala calidad sino que con frecuencia les quedan debiendo a los obreros, a quienes prestan los servicios de alimentación y a los proveedores.
Juvenal Guzmán Nocove, habitante de Pajarito, explica que el puente sobre la Quebrada Negra está a punto de colapsar, por lo que no hay posibilidades de transitar hacia ningunos de los dos departamentos, Boyacá o Casanare.
“Necesitamos que nos hagan un puente militar, que el Gobierno le preste atención a la Carretera del Cusiana, como ha hecho con la vía Bogotá-Villavicencio”, indica.
Guzmán lidera un movimiento de habitantes de Pajarito que no quieren que se permita el paso de vehículos, en especial los de carga pesada, pues el puente sobre la Quebrada Negra se puede caer el cualquier momento. “No vamos a permitir el paso de ninguna clase de vehículos; excepto lo que es ambulancias, Bomberos, el carro de la leche, que es el de los finqueros y motociclistas”, dijo el dirigente.
Agregó que no se va a permitir el paso de vehículos de la empresa que está trabajando en la carretera, porque han sido muy negligentes con la comunidad. Igualmente sostuvo que no se va a permitir el paso de vehículos con carga sobredimensionada y aseguró que se necesita intervención de la vía en varios sectores en todo el trayecto entre Sogamoso y Aguazul en donde hay puentes y tramos en mal estado.
Explicó Guzmán que los estribos del puente sobre la Quebrada Negra se han estado socavando por la acción del agua y que si se permite el paso de vehículos se producirá un colapso que causará la incomunicación total.
Agregó que, además de que se trata de un puente antiguo, el paso de vehículos con carga sobredimensionada, por la desviación del tráfico por el cierre de la Carretera entre Bogotá y Medellín, ha generado vibraciones que precipitaron el deterioro de la estructura.
El cierre parcial o total de esta carretera genera millonarias pérdidas a industriales, empresarios y comerciantes boyacenses y llaneros, además de pérdidas para todos los habitantes de la región, entre ellos agricultores, ganaderos, propietarios y trabajadores de talleres, restaurantes, lavaderos de carros, etc.
“Estamos muy olvidados por los gobiernos y los políticos apenas se acuerdan de nosotros cuando hay elecciones”, concluyó Juvenal Guzmán.
Las pérdidas para el Casanare pueden resultar mucho más cuantiosas pues se acerca la cosecha de arroz, que puede resultar muy costoso y casi imposible sacar hacia los mercados de Bogotá y varios departamentos del país.
Las obras en la Carretera del Cusiana, contratas por el Invias, son realizadas históricamente por el Consorcio MHC Mario Huertas Cotes, sobre el que hay muchas quejas en la región. En 20 kilómetros esa firma tiene 12 frentes de obra, con trabajos que son considerados por los vecinos como de muy mala calidad; además de que es usual que le queden debiendo a la gente, a los trabajadores, a los que les venden el ACPM para las máquinas o a los que les prestan el servicio de alimentación. “En un tramo en donde han intervenido instalaron adoquín que se levantó al día siguiente y nadie responde”, se quejó Juvenal Guzmán.
Carlos Salazar, transportador que utiliza la Carretera del Cusiana con frecuencia, sostiene que el Gobierno debería tener dispuesto ya un puente militar para solucionar el problema en la Quebrada Negra, porque el cierre de la vía podría extenderse durante un mes o mes y medio.
Ese puente tiene unos 40 ó 50 años, no tiene pilotes y por eso es necesario reforzarlo con una estructura militar y evitar que colapse”, dice Salazar, quien asegura que el gobierno del presidente Petro no haya incluido en su plan de inversiones los recursos para realizar estudios y diseños para la Carretera del Cusiana.
“Nos preocupa mucho que para este gobierno, en este cuatrienio, esta carretera no hubiera sido importante, cuando se podrían requerir cerca de un billón de pesos para garantizar el buen estado de todo el corredor, lo que incluye la construcción de seis nuevos viaductos”, dice.
Resalta Salazar que hoy Boyacá y Casanare están viviendo una emergencia vial como la de la Carretera entre Bogotá y Villavicencio, pero que el Gobierno nacional parece no entender que es una vía muy importante, con implicaciones para cuatro departamentos: Casanare, Vichada, Meta y Boyacá.
“Esta mañana fueron devueltos cargamentos que venían de Bogotá por Sogamoso y carga que venía para Casanare desde Santander; todos estamos perdiendo”, subraya.
Adicionalmente sostiene que esta coyuntura debería utilizarse para realizar estudios y diseños y para habilitar en tramo Yopal-El Morro-Labranzagrande-Vado Hondo-Sogamoso, por un sector que es menos inestable geológicamente.
Finalmente también indica que el contratista del Invias realiza trabajos de mala calidad, pues “no quiere dejar la tética que le representa una vía que todo el año requiere mantenimientos y arreglos. Asegura que el Invias firmó un contrato por 137.000 millones desde comienzo del año para que haga trabajos en donde se puedan presentar problemas.
Gobernador de Boyacá solicitó al Gobierno Nacional que emprenda acciones para la vía El Crucero – Pajarito
Desde el sector Quebrada Negra del municipio de Pajarito, el gobernador de Boyacá, Ramiro Barragán Adame, junto al alcalde de Pajarito, Jesús Noe Riveros, y directivas de las instituciones educativas de esa región boyacense que no tiene comunicación con el departamento de Casanare debido al colapso de la vía El Crucero – Pajarito, hizo un llamado al Instituto Nacional de Vías – Invias y al Gobierno Nacional, para que tomen acciones urgentes que garanticen la movilidad y derechos fundamentales como el trabajo y la educación, por parte de la comunidad. En la ola invernal y la falta de mantenimiento de la vía, radican aquellos problemas de infraestructura.
“Este mensaje es en nombre de todas las familias de Pajarito y los transportadores que se han quedado sin vía desde Sogamoso hasta Yopal. Necesitamos su apoyo con soluciones definitivas para la Transversal del Cusiana que une a Casanare y Boyacá», aseguró Barragán.
El Mandatario también alertó sobre el no acceso a algunos derechos fundamentales, consecuencia de la situación vial: «tenemos a 60 niñas y niños que no podrán ir a clases, 10 veredas incomunicadas y pérdidas cuantiosas. En total son 17 puntos críticos en este corredor, mientras que el estribo del puente está a punto de colapsar. El riesgo es enorme”.
Entre tanto, el Invias ejecuta obras de mitigación y monitorea el sector. Además, una comisión de especialistas revisará este martes la estructura del puente y el impacto de la creciente de la quebrada aledaña.
Por otra parte, mediante la Resolución 02772 del 14 de agosto de 2023, la entidad restringió el paso de camiones de todas las categorías, desde buses a camionetas, con peso superior a una tonelada.
“Nos unimos a la solicitud que hace el Señor Gobernador, ya que hemos sufrido las inclemencias del invierno y en esta ocasión tenemos 17 puntos afectados en este corredor vial que es tan importante para los dos departamentos. Desde el año 2021 cuando colapso el kilómetro 87, hemos pedido ayudas al Gobierno Nacional. La solicitud es que se haga una visita urgente y se coloque un puente metálico para solucionar el problema, porque la mayoría de nuestros habitantes, el 90%, vive del corredor vial. No damos más; llevamos desde el 2020 cuando inició la pandemia, sufriendo golpe tras golpe. Agradezco la visita del Gobernador a este punto, aunque sabemos que no está dentro de nuestras competencias este corredor”, manifestó así mismo el alcalde Riveros.
Estas son las vías alternas:
• La Vía al llano: Bogotá – Villavicencio – Yopal, para vehículos con peso inferior a 52 toneladas.
• La Transversal del Sisga: Bogotá – Guateque – Aguaclara – Yopal, para vehículos de menos de 30 toneladas.
• La Ruta Libertadores: Sogamoso – Belén – Socha – Sácama – La Cabuya – Hato Corozal, para vehículos menores de 25 toneladas.
