Apenas dos meses en el gabinete de Mikhail Krasnov aguantaron dos de las funcionarias sobre las que había mayores expectativas. Descartan que se hayan roto las relaciones políticas entre el Alcalde y el sector liberal que orienta el diputado Rodrigo Rojas.
Tal vez la falta de experiencia fue el principal factor que determinó la renuncia ayer de la Secretaria de Hacienda y de la Jefe del Gabinete del alcalde, Mikhail Krasnov.
Lo cierto es que las dos funcionarias no aguantaron la presión de tener que enfrentar un compromiso tan grande al frente de dos cargos que demandan mucho conocimiento y buenas relaciones con funcionarios internos y con actores políticos.
La secretaria de Hacienda Adriana Carolina Gutiérrez presentó su renuncia cuando apenas completaba dos meses de trabajo al lado del alcalde Krasnov.
En círculos políticos se indica que la principal razón de esa dimisión fue el resultado de los debates de control político que le realizaron en el Concejo, en donde ella no pudo responder satisfactoriamente sobre aspectos como la modificación del presupuesto municipal, desconociendo la tarea legal que en esos cambios le corresponde a los concejales.
La Secretaria había dado muestras de no conocer exactamente como se manejan las financias municipales.
A finales de enero, la Secretaria, acompañada del Alcalde, participó en la grabación de un video en el que denunciaba que “la administración adelantó el estudio de 904 cuentas aproximadamente de vigencias anteriores; más de 17.000 millones de pesos se constituyeron en cuentas por pagar; a 31 de diciembre de 2023 el valor total de los registros presupuestales expedidos que cuentan con saldos pendientes por obligar, ascienden a una suma de más de 31.300 millones de pesos. De estos, más de 12.700 millones se constituyeron como reserva presupuestal y más de 18.600 millones de pesos, al no contar con justificación para constituirse como una reserva presupuestal, se constituyeron como un pasivo del municipio”.
Pues, según los entendidos, esas cuentas por pagar corresponden a obligaciones normales y compromisos que tienen que atender los gobiernos, independientemente del cambio de mandatarios, pues la administración no se puede detener y en un mes, cualquier mes del año, es necesario continuar pagando las deudas que los gobiernos adquieren.
Pero, adicionalmente, a la Secretaría no le fue bien en un debate del control político en el Concejo, en el que los integrantes de esa corporación ‘la cogieron por su cuenta’.
Por su parte Jessica Tatiana Zipa Martínez se va del cargo de jefa de Gabinete porque tuvo algunas dificultades con el Alcalde, pero especialmente debido a que nunca se entendió con los demás integrantes del gabinete.
Zipa Martínez es amiga personal y muy cercana al diputado Rodrigo Rojas y, además de que le asignaron salario de funcionaria de tercera categoría, no tenía ninguna autoridad para coordinar actividades con los demás integrantes del equipo de Krasnov.
“No encuentro eco en lo que hago o digo”, se les escuchó decir a la funcionaria, que apenas devengaba un poco más de cuatro millones de pesos, pero que ostentaba un cargo que sonaba pomposo: “Jefa del gabinete”.
Las dos funcionarias que dimitieron ayer se consideraban cuotas políticas del diputado Rodrigo Rojas, aunque el Alcalde siempre había aclarado que llegaron al gabinete por él y no por recomendación de nadie.
Fuentes cercanas a la Alcaldía señalaron que no existe ninguna ruptura política entre Krasnov y el excandidato a la Gobernación Rodrigo Rojas, pero ahora habrá que ver si quienes las remplacen son cercanas al ahora diputado.
