Gobierno Departamental y Municipal han unido esfuerzos para ampliar la capacidad de respuesta hospitalaria de la capital boyacense.
Tunja se encuentra en el momento más crítico en lo que va de la pandemia. Nunca antes había tenido una ocupación hospitalaria como la registrada en estos primeros días de 2021.
Según ha informado el mismo alcalde de la ciudad, Alejandro Fúneme, al término del 6 de enero, la ocupación en camas UCI es del 81%, en hospitalización general la ocupación es del 100%. “Hay un riesgo de colapso en la red de prestación de servicios hospitalarios”, señaló Alejandro Fúneme.
Sin embargo, la problemática va más allá de la cantidad de camas UCI, ya que el limitado personal apto para el manejo de una UCI y la escasez de medicamentos, son dos situaciones complementarias que agravan el panorama.
De acuerdo a la circular emitida en las últimas horas por el Ministerio del Interior, aquellas ciudades que superen el 80% de ocupación en Unidades de Cuidado Intensivo, deberán acogerse a medidas como “Restringir la circulación de personas y vehículos por vías y lugares públicos entre las 20:00 horas y las 5:00 horas, desde el jueves 7 de enero de 2021, hasta el día 12 de enero de 2021. Se permiten los servicios domiciliarios. Prohibir todo tipo de reuniones públicas y privadas, eventos deportivos, recreativos o culturales que generen aglomeración de personas en espacios públicos y cerrados. Realizar una constante auditoria concurrente de los centros asistenciales para la verificación de la ocupación de camas UCI y activar un corredor de atención a través del CRUE en coordinación con el Ministerio de Salud y Protección Social con los centros de atención hospitalaria de ciudades cercanas”.
