El contratista, exalcaldes, interventores, aseguradoras y directores técnicos, unas 30 personas, están involucrados en el proceso fiscal que adelanta la Contraloría General de la República por lo ocurrido en esos dos proyectos de vivienda. El municipio de Tunja podría tener pérdidas por unos 80 mil millones de pesos, dice el exalcalde Pablo Cepeda.
Torres del Parque y Estancia del Roble, los dos proyectos de vivienda más ambiciosos en la historia de Tunja y Boyacá terminaron convertidos en un dolor de cabeza para el constructor, Iáder Barrios, que hoy está quebrado; para el Banco Sudameris, que prestó la plata; para los usuarios que tienen embolatados su ahorro programado; y para las autoridades municipales, que han tenido que responder por sus actuaciones ante los órganos de control.
En esta entrevista el exalcalde de Tunja Pablo Emilio Cepeda nos cuenta cómo estaban esos programas de vivienda cuando él asumió la administración en el 2016, cuáles fueron sus decisiones sobre el proyecto, que pasó con los estudios que señalaban que varias torres debían ser demolidas y cuánto y quiénes perdieron con esos dos proyectos.
EL DIARIO: Cuando Usted llegó a la Alcaldía, ¿cómo iban Estancia del Roble y Torres del Parque? ¿Qué encontró Usted?
Pablo Cepeda. Encontré todo un lío. Había incumplimientos en los dos proyectos, con resoluciones de incumplimiento por parte del Ministerio de Vivienda. Torres y Estancia habían sido declarados como proyectos siniestrados. Sin embargo, logré levantar el incumplimiento de unos de los dos proyectos y pagamos pólizas; se fijó un cronograma de trabajo que el contratista nunca cumplió. Intentamos levantar el segundo proyecto con una póliza que alguna vez había existido pero no pudimos hacerlo porque se vencieron los plazos para las uniones temporales que se había creado y no se prorrogaron más. Nosotros proferimos un acto administrativo que daba por terminada las uniones temporales por vencimiento de plazos, pero cuando íbamos a liquidarlas apareció la intervención declarada por Paipa que se tomó todos los activos y proyectos del constructor Iáder Barrios en varias ciudades, así que no pudimos liquidar. Finalmente, unos estudios iniciales de la Sociedad Boyacense de Ingenieros y Arquitectos nos indicaron que había que evacuar varias torres por la mala calidad de los materiales utilizados.
EL DIARIO: Pero Iáder Barrios también presentó unos estudios que señalaban que las edificaciones cumplían con las especificaciones técnicas y que contradecían lo que indicaba la Sociedad Boyacense de Ingenieros y Arquitectos.
Es cierto, pero esos estudios que él presentó no eran lo suficientemente juiciosos. De todas formas nosotros sugerimos otros estudios, que realizó la Uptc y esos señalaron unas situaciones incluso más preocupantes.
EL DIARIO: ¿Qué decían esos estudios?
Indicaban que había problemas de estabilidad por oxidación acelerada de las estructuras de hierro; que si las estructuras eran para 50 años apenas podrían durar cinco o diez años, lo que significaba el riesgo de alguna desgracia.
EL DIARIO: Pero si estaban tan mal los edificios, ¿por qué no se ha caído ninguno?
No se ha caído pero ese es un riesgo que no podemos permitir. Tunja está ubicada en una zona de alto riesgo sismológico; no sabemos cuándo pueda ocurrir algo y no podemos permitir que familias corran peligro.
EL DIARIO: ¿El constructor había amenazado que si ustedes daban por terminadas las uniones temporales él presentaría demandas millonarias contra el municipio. ¿Lo hizo?
Iáder Barios presentó unas demandas, pero cuando el caso llegó a un tribunal de arbitramento desistió de sus pretensiones. Después fuimos nosotros los que lo demandamos a él y esas demandas están en el Tribunal Contencioso Administrativo.
EL DIARIO: ¿Cuántos eran las soluciones de vivienda de Estancia del Roble y Torres del Parque?
En Estancia eran como 1.400 y en Torres una cifra parecida.
EL DIARIO: ¿y cuántas se habían entregado?
En Estancia del Roble había entregado unas 700 y en Torres del Parque faltaban por entregar unas 340.
¿Esos usuarios, a quienes no se les entregaron sus viviendas, cuánto perdieron?
Cada familia perdió lo de su ahorro programado, unos nueve millones de pesos de la época. Esa plata no fue a una fiducia ni a un fideicomiso sino que fue depositada en las cuentas bancarias del constructor.
EL DIARIO ¿Su Gobierno qué hizo con esos usuarios, los que no recibieron sus soluciones de vivienda?
En el 2018, dejamos una plata en el presupuesto y en el 2019 los mismo; la idea era solucionar el problema para las familias que habíamos evacuado por el concepto sobre la mala calidad de las obras. Cuando salí de la Alcaldía, en el 2019, dejamos contratos para construcción de 150 soluciones. Hoy 50 de esos apartamentos no han sido todavía entregados; no sabemos por qué.
EL DIARIO: ¿Es el caso de Torres del Parque y Estancia del Roble un caso de corrupción?
No puedo hacer esa calificación; yo creo que fue un problema técnico y financiero.
EL DIARIO: ¿Cómo así que un problema técnico y financiero?
Pues sí hubo aspectos técnicos que no se cumplieron por parte del contratista. Si yo mando hacer una casa y pido que le pongan 100 varillas y pago por ellas y el constructor solamente pone 25 varillas, o si pone mucho menos cemento del que se requiere…
EL DIARIO: ¿Qué decía sobre todo eso la interventoría de esas obras?
Eso es lo que no se sabe. Los alcaldes seguramente creían en los informes de interventoría y entonces hay que trasladarle la pregunta a esos interventores. Por qué avalaron esas construcciones.
EL DIARIO ¿Eso no es corrupción?
Eso lo tiene que establecer las autoridades, los organismos de control. Yo no lo puedo calificar así.
EL DIARIO. ¿Cuánto perdió el municipio?
Yo pensaría que unos 80 mil millones de pesos, sin tener en cuenta las demandas que podrían salir en su contra.
EL DIARIO: ¿y los alcaldes antes de Usted, qué responsabilidad tuvieron?
Es que supongo que ellos creyeron en los informes de las interventorías, pero yo no puedo calificar tampoco lo que hicieron Arturo Montejo y Fernando Flórez. Seguramente ellos tendrán que dar las explicaciones.
EL DIARIO. Pues parece que ellos tampoco vieron nada.
Lo que pasa es que los dos proyectos estaban muy bien maquillados. Si uno iba y veía esas calles tan amplias y esas canchas sintéticas tan bonitas, esos parques, en fin, uno creía que eran dos grandes proyectos, pero un alcalde no se detiene en los detalles de las obras porque esos conceptos los dan los interventores.
EL DIARIO. Con semejante descalabro, por qué no hay nadie en la cárcel?
Todos sabían lo que pasaba en esos dos proyectos. Durante mi administración fue convocado varias veces el Comité de Moralización, en el que estaban la Procuraduría, la Contraloría, la Fiscalía, la Defensoría, todos. Yo tengo cómo explicar mis actuaciones, los demás tendrán que dar las suyas. Los proyectos de Tunja no fueron los únicos de Iáder Barrios siniestrados; ahí están los casos de Yopal, Puerto Boyacá, Ventaquemada…
EL DIARIO ¿El Banco Sudameris, que prestó dinero al constructor, también perdió?
Eso supone uno, pero cuando fuimos ante ellos solo nos respondieron que había una deuda. Cuando les pedimos algunos documentos nos tocó pagar las fotocopias y no dan mucha información.
EL DIARIO: Iáder Barrios dijo siempre que él estaba entregando apartamentos, que despacio, pero que iba a cumplirle a todos.
Eso no es cierto; ya estaba muy atrasado. No cumplió los cronogramas y ya estaba ilíquido, de manera que nunca iba a cumplir.
EL DIARIO. ¿Qué hubiera pasado si ustedes no hubieran dado por terminadas las uniones temporales?
Hubiéramos tenido que seguir prorrogando los plazos de entrega; eso era alargar el sufrimiento de la gente sin que al final se hubiera logrado nada.
EL DIARIO: ¿Usted ha tenido que dar explicaciones ante la Contraloría?
Claro que sí y muchas personas más, exalcaldes, directores de obra, interventores, el constructor, las aseguradoras, más de 30 personas.
[…] Debe leer: ¿Quiénes y cuánto perdieron por el descalabro de los proyectos Estancia del Roble y Torres del Pa… […]