La actualización catastral no se ha hecho en aproximadamente el 75% del territorio boyacense, según indica el Instituto Geográfico Agustín Codazzi esto atenta directamente contra las finanzas del departamento.
Tener pleno conocimiento de la situación catastral del departamento hoy es una verdadera odisea. Según las cifras presentadas por el Instituto Geográfico Agustín Codazzi (IGAC), la desactualización es alarmante.
De 123 municipios que tiene el departamento, 93 presentan una desactualización catastral de más de cinco años, a nivel urbano y a nivel rural. De acuerdo a lo que indica el IGAC, esto equivale a un 75% del territorio que presenta un rezago catastral.
Hay casos alarmantes como el de La Uvita, municipio que lleva 27 años sin realizar una actualización catastral. Otros, como Jericó y San Mateo, no realizan una actualización hace 25 años.
El IGAC alarmó de esta situación a varios de los alcaldes de los municipios donde se presenta esta problemática, y les hizo una invitación para que la actualización catastral se haga lo más pronto posible. Esto con el fin de establecer la verdadera cantidad de predios existentes en sus respectivos municipios, así como la cantidad de metros cuadrados construidos.
Según advierte el IGAC, la actualización catastral trae beneficios como la ampliación del conocimiento acerca del ordenamiento territorial, y la mejora en las finanzas de los municipios de acuerdo al establecimiento de un justo recaudo de impuestos a partir del conocimiento del territorio.
“Para darle un vuelco a este panorama, el Instituto Geográfico Agustín Codazzi les ha presentado a los alcaldes del departamento varias propuestas para poner en marcha procesos de actualización catastral y conservación dinámica. Hasta el momento, para disminuir ese fenómeno de desactualización, ha consolidado alianzas catastrales con siete municipios: Tunja, Tibasosa, Jenesano, Tuta, Villa de Leyva,Garagoa y Tinjaca”, comentó el director territorial del IGAC en Boyacá, Mauricio Mejía.
